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DEPORTE EN ALTITUD
Ventajas e inconvenientes.

Las recomendaciones alimentarias habituales dadas a los deportistas también se aplican en este caso (consultar el artículo « Alimentación durante una competición »), pero con algunas pequeñas adaptaciones.
El fenómeno de la altitud sobre el aumento del número de glóbulos rojos es ampliamente conocido.
Este aumento permite transportar más oxígeno (dado que estos glóbulos permiten transportar oxígeno, según el hierro que contienen).

Como resultado del aumento del número de glóbulos rojos, los deportistas en altitud sienten una gran necesidad de hierro y proteínas.

Dado que las pérdidas hídricas son superiores en altitud, es conveniente incrementar el aporte de agua antes, durante y después del esfuerzo.
Puede que sea más seguro elaborar un plan hídrico preciso y adaptado (por escrito) que servirá de referencia. La aparición de la sensación de sed indica una fuerte deshidratación celular.

Durante una estancia deportiva en altitud, es importante dar prioridad a la carne, al pescado y a los lácteos de modo que las proteínas representen un máximo de 1,8 a 2 gr. por kg de peso corporal por día.
Los alimentos ricos en hierro deben ser privilegiados y consumidos lo más frecuentemente posible ; se trata, por ejemplo, de carnes rojas, de chorizo, hígado, legumbres (principalmente lentejas), soja, germen de trigo, chocolate,  productos oleaginosos,  pano integral…
Al hacer la opción inteligente de aumentar la densidad nutricional (gracias a los alimentos ricos en hierro), el deportista aumenta su aporte de hierro sin aumentar el aporte energético.
Por otro lado, determinados alimentos activan la asimilación del hierro en el organismo y deben ser consumidos lo más frecuentemente posiblel, como por ejemplo el limón (la vitamina C en general), el perejil, que es interesante incluir en las comidas.


Otros alimentos inhiben esta asimilación del hierro y, por lo tanto, deben ser evitados, como por ejemplo las acelgas y las espinacas.

¡Atención! Los suplementos de hierro, si fuesen necesarios, deben ser recetados por un médico.